(CNN)– España parece destinada a tener unas duras negociaciones políticas tras la elecciones del domingo, cuando ningún partido obtuvo suficientes escaños parlamentarios para formar gobierno. Tal como están las cosas, las perspectivas de formación de coaliciones siguen siendo inciertas.
Con más del 99% de los votos escrutados, el Partido Popular (PP), de centroderecha, ocupará el primer lugar con 136 escaños. Se espera que el advenedizo partido de extrema derecha Vox, un posible socio de coalición del PP, gane 33 escaños.
Mientras tanto, el gobernante Partido Socialista de centroizquierda del primer ministro Pedro Sánchez está en camino de ganar 122 escaños, con el movimiento Sumar, probables socios de coalición, obteniendo 31 escaños.
Resultados elecciones generales de España 23J, en directo
Para gobernar, un partido o coalición debe lograr una mayoría de trabajo de 176 escaños en la legislatura de 350 asientos.
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, dijo estar “muy orgulloso” durante un discurso en la sede del partido, elogiando el hecho de que el porcentaje de votos de su partido pasó del 21% al 33%.
El líder y candidato del conservador Partido Popular Alberto Núñez Feijoo se dirige a sus seguidores desde un balcón de la sede del PP en Madrid tras las elecciones generales españolas del 23 de julio de 2023. Crédito: OSCAR DEL POZO/AFP vía Getty Images
A pesar de un ambiente de fiesta en la sede del PP, los partidarios del partido de oposición le dijeron a CNN que esperaban una victoria más rotunda.
“Pensamos que recibiríamos mucho más”, dijo Mercedes Gónzalez, profesora de inglés en Madrid.
Y Fernando del Río, un diseñador web madrileño de 21 años, también dijo estar insatisfecho. “La gente habló en contra del gobierno socialista, pero eso no se tradujo en votos”, dijo.
Mientras tanto, afuera de la sede del Partido Socialista, los simpatizantes estaban optimistas.
Agustín Saludes, de 64 años, funcionario jubilado anticipadamente, le dijo a CNN que estaba contento con los resultados. “Porque no esperábamos obtener tantos votos. Pensamos que perderíamos. Contra Sánchez fue una campaña dura”, comentó.
“(Sánchez) tiene que hacer tratos con los partidos independentistas de Cataluña y del País Vasco para ganar la investidura”, añadió Saludes.
Una apuesta política
Convocar a la votación para el domingo fue una apuesta política para Sánchez, después de que su partido sufriera importantes reveses en las elecciones autonómicas y locales de mayo. El PP dio grandes pasos ese mes, en medio de un giro a la derecha en la política europea en todo el continente.
La mayoría de las encuestas predijeron que el PP ganaría más votos el domingo, pero no alcanzaría la mayoría absoluta en el Parlamento, lo que significa que probablemente tendría que formar una coalición con el partido de extrema derecha Vox.
Tal arreglo habría provocado controversia al permitir que un partido de extrema derecha entrara en el gobierno por primera vez en décadas. Pero el emocionante recuento de votos del domingo no ofreció un camino fácil para que se formara una coalición de derecha.
Vox, que respalda políticas que harían retroceder las protecciones de igualdad para mujeres y personas LGBTQ, finalmente perdió algunos escaños en la votación del domingo, frente a los 52 que ganó en las últimas elecciones.
Varios partidos regionales más pequeños también están a punto de ganar escaños, varios de los cuales han brindado previamente apoyo al gobierno de Sánchez.
Pedro Sánchez celebra con simpatizantes después de las elecciones generales de España en la sede del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en Madrid el 23 de julio de 2023. Credit: JAVIER SORIANO/AFP vía Getty Images
Andrés Villena, profesor de la Universidad Complutense de Madrid, le dijo a CNN antes de la votación que, al convocar a las elecciones, Sánchez hizo “un movimiento de ajedrez complejo” y puede haber tenido como objetivo superar a Feijóo, un presidente regional durante mucho tiempo en el noroeste de España que solo ha estado a cargo del partido nacional desde abril de 2022 y no ha sido probado en una elección nacional.
Durante su tiempo en el gobierno, Sánchez impulsó una agenda progresista, incluidas políticas sobre los derechos de las mujeres y una ley de eutanasia. Estas reformas ganaron votos en las zonas urbanas, pero el ritmo del cambio también provocó rechazo en otras partes del país.
Ahora podrían pasar semanas antes de que se aclare el camino a seguir en el país, con negociaciones y reuniones entre partidos que involucran al rey Felipe VI de España aún por venir mientras las partes compiten por formar un gobierno.